La gestión de continuidad del negocio es un enfoque estratégico que permite a una organización prepararse, responder y recuperarse eficazmente ante interrupciones inesperadas que puedan afectar sus operaciones críticas. Su objetivo principal es asegurar que la empresa pueda seguir funcionando —o reanudar sus actividades lo más rápido posible— ante situaciones como desastres naturales, fallos tecnológicos, ciberataques, pandemias o cualquier otro evento disruptivo.
En definitiva, se trata de identificar los riesgos clave, establecer planes de respuesta y recuperación, y poner en marcha procedimientos que minimicen el impacto sobre las operaciones, los empleados, los clientes y la reputación de la empresa.
La normativa ISO que regula la gestión de continuidad del negocio es la ISO 22301. Esta norma internacional proporciona un marco para establecer, implementar, mantener y mejorar un sistema de gestión de continuidad del negocio.
Puntos clave de la ISO 22301:
- Enfoque basado en riesgos: evalúa las amenazas que pueden afectar a la organización y establece medidas para mitigarlas.
- Requisitos del sistema de gestión: incluye liderazgo, planificación, soporte, operación, evaluación del desempeño y mejora continua.
- Análisis de impacto en el negocio (BIA) y evaluación de riesgos: elementos esenciales para priorizar funciones y procesos.
- Planes de respuesta y recuperación: deben estar documentados, probados y actualizados.
- Cultura organizacional: fomenta la concienciación de todo el personal sobre su rol durante una crisis.
Beneficios de aplicar la ISO 22301:
- Asegura la resiliencia operativa.
- Mejora la credibilidad y reputación frente a clientes y socios.
- Facilita el cumplimiento legal y regulatorio.
- Permite una respuesta coordinada y eficaz ante incidentes.
Esta norma es aplicable a cualquier tipo de organización, independientemente de su tamaño o sector. Se puede utilizar con el objetivo de obtener la certificación o simplemente como guión para instalar la mejora continua en la organización.
Implementar una buena gestión de continuidad no solo protege los intereses de la empresa, sino que también refuerza la confianza de clientes, proveedores y accionistas.
Si estás interesado en conocer más sobre esta norma, su implementación, su automatización, su integración con otras normas ISO, o cualquier otro tema, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.